La bendición estuvo a cargo del sacerdote celebrante quien al dirigir un emotivo mensaje, dijo que “Esta pareja tiene que agradecerle a Dios por estos cincuenta años de vida matrimonial y por tantas cosas que ha recibido durante este tiempo; pero, recalcó que sí, es posible, cuando hay disposición, diálogo, fidelidad, amor, calor y cuando se tiene a Dios en la vida.”
En la misma ceremonia religiosa, este matrimonio dio gracias a Dios, por darles fortaleza y sabiduría, que ha servido de base para formar a cada uno de sus cinco hijos y darles una carrera profesional y así convertirlos en personas de bien para la sociedad. De igual manera, manifestaron su agradecimiento a los amigos que siempre los han apoyado en las buenas, los malos momentos de tristeza y que los han ayudado para que este matrimonio permanezca firme y haya llegado a la meta de cumplir y festejar sus bodas de oro.
Al término de la misa y bajo la amenaza de una fuerte tormenta, los asistentes se dieron cita a la recepción que se llevó a cabo en el salón de “La Terraza de los Abuelos” donde los esposos rodeados de cariño, compartieron estos felices momentos con sus hijos, familiares y amigos, que se hicieron presentes.
Fotos: Javier Lamas
Organizado por sus hijos, los novios fueron objeto de una emotiva bienvenida, la cual estuvo repleta de nostalgia, alegría y de sorpresas, pues se revivieron etapas de la vida matrimonial, hasta la llegada de su descendencia a través de un video de imágenes que marcaron la vida de este feliz matrimonio.
Con la presencia del maestro de ceremonias, locutor y periodista, Julio César Olivo, de Nueva Rosita, Coahuila, quien anunció la participación de Ileana, Héctor de Jesús (el Chino), Cinthya, Viris y Danny, (hijos del matrimonio), mismos que cantaron la hermosa canción “Hasta mi Final” ( il divo), que fue interpretada a la perfección y que arrancó muchos aplausos. Posteriormente, se escuchó la melodía “Color Esperanza” en la que bailaron con mucho amor y entusiasmo los ocho nietos de don Héctor y de doña Sara y por último, llegó un estupendo mariachi que deleitó con canciones de antaño que fueron dedicadas a los titulares del matrimonio Rivera Arreguin y que también disfrutaron los invitados a esta gran fiesta.
Cabe destacar que los matrimonios que han tenido la dicha de cumplir sus Bodas de Oro, supieron cómo vencer cada uno de los tropiezos y adversidades que se les presentaron durante esos años de vida conyugal. Por desgracia, otros, son los que llegan a la mitad del camino que por diversas circunstancias, no llegan a cumplir su enorme deseo de celebrar este aniversario de color dorado.
Es por eso, que queremos felicitar a este matrimonio y a su descendencia familiar, por esta dicha y desearle lo mejor. Mil felicidades, por la suerte que han tenido de que Dios les haya permitido cumplir sus Bodas de Oro, bajo el marco del símbolo del amor y la unión familiar.